Hola Readers! Estoy trabajando en varias reseñas y unas cuantas entradas random que espero mostrarles muy pronto. Ahora, tampoco quería dejar de publicar y he decidido traerles una selección de mis frases favoritas del libro "La ladrona de libros" Que si no me equivoco no lo he mencionado ninguna vez, y este libro en particular realmente se merece una entrada para sí.
La verdad me he entretenido bastante buscando las frases, e incluso me sorprendí de la gran cantidad que hay, y es que no pensé que iba a ser tan difícil escogerlas; cada una hizo darle un vuelco a mi estómago, y me sorprendí que con solo dos líneas o dos palabras me hicieran recordar la esencia y lo maravilloso que es este libro.
Aprovecho de decir también, que algunas de las frases o escenas pueden ser spoilers para los que no hayan leído el libro o visto la película. Sin embargo estas frases las pondré de color azul:)
Comencemos!
"Sus ojos no reaccionaron conmocionados. No se abrieron y cerraron de repente, ni parpadearon, ni pestañearon. Eso ocurre cuando despiertas de una pesadilla, no cuando despiertas en una pesadilla. No, sus ojos se abrieron a la fuerza, de la oscuridad a la penumbra. El cuerpo fue el primero en reaccionar, se enderezó y estiró un brazo para estrechar el aire."
En algún lugar, en lo más profundo, sentía una punzada en el corazón, pero decidió no hurgar. Temía lo que pudiera salir.
Se mató por querer vivir.
¿HAY ALGO PEOR QUE UN CHICO QUE TE ODIE?
Un chico que te quiera.
"Sobrevivió porque estaba en un sótano releyendo la historia de su vida en busca de errores." "No se despidió. No tuvo fuerzas. Minutos después, logró apartarse de él y arrancarse del suelo. Me maravilla lo que los humanos son capaces de hacer aunque estén llorando a lágrima viva, que sigan adelante, tambaleantes, tosiendo, rebuscando y hallando."
La muerte y tú
Primero los colores.
Luego los humanos.
Así es como acostumbro a ver las cosas.
O, al menos, así intento verlas.
Un pequeño detalle: morirás.
"¿Cómo le regalas a alguien un pedazo de cielo?"
"Miré, sólo unos segundos."
"En realidad, no importaba de qué tratara el libro, lo importante era lo que significaba."
"Cómo no va a gustarle a alguien un hombre que no sólo se fija en los colores, sino que además los comenta."
"—Podría ser peor —miró a los ojos judíos de su amigo—. Podría ser tú."
"No siempre se consigue lo que se desea."
"Intercambiaron una mirada y sintieron la tentación de salir corriendo a esconderse en las habitaciones; sin embargo, el temor es una emoción de lo más extraña: no podían moverse."
Si repites algo muchas veces, nunca lo olvidarás.
Había visto morir a su hermano con un ojo abierto y el otro todavía soñando. Se había despedido de su madre y había imaginado la solitaria espera de un tren que la llevaría de vuelta al olvido.
Había visto desfilar hacia un campo de concentración a un judío que en dos ocasiones le había entregado las páginas más hermosas de su vida.
Esas imágenes eran el mundo, que se removía en su interior mientras seguía allí sentada, con los hermosos libros de cuidados títulos.

"Si tus ojos pudieran hablar, ¿que dirían?"
Levanta ese ánimo —se dijo—. No puedes parecer asustado. Lee el libro. Sonríe. Es un gran libro, el mejor libro que hayas leído jamás.
En algún lugar, en lo más profundo, sentía una punzada en el corazón, pero decidió no hurgar. Temía lo que pudiera salir.
Se mató por querer vivir.
¿HAY ALGO PEOR QUE UN CHICO QUE TE ODIE?
Un chico que te quiera.
¿Sabes?, durante un breve instante, a pesar de todos los colores que se cruzan y se enfrentan con lo que veo en este mundo, suelo atisbar un eclipse cuando muere un humano.
He visto millones. He visto más eclipses de los que quisiera recordar.
He visto millones. He visto más eclipses de los que quisiera recordar.
Ella era una ladrona de libros.
Él asaltaba el cielo.
"El corazón de los humanos no es como el mío. El de los humanos es una línea, mientras que el mío es un círculo y poseo la infinita habilidad de estar en el lugar apropiado en el momento oportuno. La consecuencia es que siempre encuentro humanos en su mejor y en su peor momento. Veo su fealdad y su belleza y me pregunto cómo ambas pueden ser lo mismo. Sin embargo, tienen algo que les envidio: al menos los humanos tienen el buen juicio de morir. "
"Sobrevivió porque estaba en un sótano releyendo la historia de su vida en busca de errores." "No se despidió. No tuvo fuerzas. Minutos después, logró apartarse de él y arrancarse del suelo. Me maravilla lo que los humanos son capaces de hacer aunque estén llorando a lágrima viva, que sigan adelante, tambaleantes, tosiendo, rebuscando y hallando."
¿Por qué el cielo estaba rojo? ¿Cómo podía estar nevando? ¿Y por qué los copos de nieve le abrasaban los brazos?
"Un ojo abierto.
El otro soñando."
"Ese instante se dilató hasta el infinito. La eternidad de unas décimas de segundo en que se toma una decisión."
—No, creo que se han olvidado de mí.
—Ya, ¿y lo has vuelto a intentar? No puedes quedarte ahí sentado esperando que el nuevo mundo se adapte a ti, eres tú el que tiene que adaptarse... A pesar de los errores pasados.
No hubo ni enfados ni reproches.
"¿Qué aspecto tenía?" preguntó Hans.
Max levantó la cabeza con gran pesar y estupefacción.
"Había estrellas"contestó. "Me quemaron los ojos."
"Hace un dia precioso" Dijo Max con voz quebrada.
"Buscó en el bolso y sacó un librito negro cuyas tapas no albergaban una historia, sino papel pautado.
—Se me ocurrió que si ya no ibas a leer mis libros, tal vez te gustaría escribir uno."
—Se me ocurrió que si ya no ibas a leer mis libros, tal vez te gustaría escribir uno."
"Liesel estaba convencida de que su madre llevaba a cuestas el recuerdo de su hermano. Lo dejó caer al suelo. Vio cómo los pies, las piernas y el cuerpo del niño se estampaban contra el andén.
¿Cómo podía andar esa mujer?
¿Cómo podía moverse?
Es el tipo de cosas que nunca sabré o llegaré a comprender: de qué son capaces los humanos.
A veces llego demasiado pronto, me adelanto.
Y hay gente que se aferra a la vida más de lo esperado.
"Quise decirle muchas cosas a la ladrona de libros, sobre la belleza y la crueldad, pero ¿qué podía contarle sobre todo eso que ella no supiera? Quise explicarle que no dejo de sobreestimar e infravalorar a la raza humana, que pocas veces me limito únicamente a valorarla. Quise preguntarle cómo un mismo hecho puede ser espléndido y terrible a la vez, y una misma palabra, dura y sublime. Sin embargo, no abrí la boca. Sólo conseguí hablar para confiarle a Liesel Meminger la única verdad que hago mía. Se lo dije a la ladrona de libros, y ahora te lo digo a ti."
"Viajé por todo el mundo como siempre, acompañando las almas hasta la cinta transportadora de la eternidad."
La niña: Dime, ¿qué ves cuando tienes esos sueños?
El judío: ... Me veo a mí mismo volviéndome y despidiéndome.
El judío: ... Me veo a mí mismo volviéndome y despidiéndome.
«A menudo deseo que todo esto acabe, Liesel, pero entonces, no sé cómo, pasa algo... tú bajas al sótano con un muñeco de nieve en las manos.»
¿Por qué no pelea?, se interrogó.
¿Dónde está la voluntad de seguir adelante?
¿Dónde está la voluntad de seguir adelante?
Si hubiera podido ver arrodillada a la ladrona de libros junto a su cuerpo diezmado, habría gritado de alegría y girado sobre sí mismo y sonreído. Le habría encantado contemplarla besándole los polvorientos labios devastados por las bombas.
Sí, lo sé.
En la profunda oscuridad de mi corazón de siniestros latidos, lo sé. Le habría gustado, sin duda.
¿Lo ves?
Hasta la muerte tiene corazón.
¿Quieres saber qué aspecto tengo en realidad? Te ayudaré. Ve a buscar un espejo mientras sigo.
"Liesel sacó El árbol de las palabras de la bolsa y le enseñó a Rudy una de las páginas en la que aparecía un niño con tres medallas colgando del cuello.
—«El pelo de color limón» —leyó Rudy. Tocó las palabras con los dedos—. ¿Le hablabas de mí?
Liesel no pudo responder enseguida. Tal vez fue la súbita sacudida amorosa que sintió por él. ¿O había sido así siempre? Era probable. Privada del habla, deseó que la besara, que la agarrara de la mano y la atrajera hacia él. No importaba dónde. En la boca, en el cuello, en la mejilla. Tenía toda la piel libre para él, a la espera.
Se estaba despidiendo y ni siquiera lo sabía."
❃
"La montaña de escombros era cada vez mayor. Colinas de cemento coronadas de rojo. Una bella joven vapuleada por las lágrimas, zarandeando a los muertos.
Incrédula, Liesel enterró la cara en el pecho de Rudy. Incorporó el cuerpo inerte intentando que no se fuera hacia atrás, pese a que no le quedó más remedio que devolverlo al suelo devastado. Con suavidad.
Despacio. Despacio.
—Dios, Rudy...
Se inclinó sobre el rostro sin vida y besó en los labios con delicadeza a su mejor amigo, Rudy Steiner. "
Incrédula, Liesel enterró la cara en el pecho de Rudy. Incorporó el cuerpo inerte intentando que no se fuera hacia atrás, pese a que no le quedó más remedio que devolverlo al suelo devastado. Con suavidad.
Despacio. Despacio.
—Dios, Rudy...
Se inclinó sobre el rostro sin vida y besó en los labios con delicadeza a su mejor amigo, Rudy Steiner. "
"Miré un momento lo que contenía su alma y vi un niño tiznado de negro gritando el nombre de Jesse Owens mientras se llevaba por delante la cinta de llegada. Lo vi hundido hasta la cintura en el agua gélida, intentado atrapar un libro, y vi un niño tumbado en la cama imaginando el sabor que tendría un beso de su extraordinaria vecina. Este chico puede conmigo. Siempre. Es lo único malo que tiene. Me rompe el corazón. Me hace llorar."
El silencio no era quietud o calma, y desde luego no era paz.
«He odiado las palabras y las he amado, y espero haber estado a su altura.»
Los humanos me acechan.
Realmente espero que les haya gustado<3 Y creanme trate de seleccionarlas lo mejor que pude, pero es que habían algunas que simplemente no podía dejarlas fuera.
Nos vemos en la próxima entrada!
Sin nada más que decir,
Sthef.